A una semana de la Media Maratón de Gijón y dos meses después de lesionarme el tobillo, las
piernas y la cabeza ya están listas y ansiosas de escuchar una vez más el
disparo de salida.
El tobillo parece resistir bien y las
piernas, aunque cansadas por las tiradas largas de estos fines de semana,
también parecen estar preparadas.
Han sido un par de meses largos, de
poco entrenamiento y sobre todo de poca intensidad en los mismos, eso lo estoy
notando en las tiradas de los fines de semana en las que me encuentro perfectamente en cuanto a
“resistencia”, pero me cuesta
mucho meterme en ritmos a los que creía estaba ya acostumbrado.
Sin ir más lejos, este fin de semana he
hecho 18k el sábado con ritmo medio 4:52 y hoy domingo 20k haciendo los
primeros 18 en 4:47, los dos últimos soltando más lentos. Pulsaciones siempre
más altas de lo habitual y notando que no tenía mucho margen de mejora en
ritmo.
La verdad que al parón por la lesión se
ha unido bastante lío de trabajo en el último mes, impidiéndome entrenar con
asiduidad y no pudiendo hacer series, fartlek… así que he optado por hacer
rodajes largos los sábados y domingos para al menos volver a coger un poco de
forma física y no sufrir mucho el día de
la Media.
Como creo que es bueno ponerse
objetivos en esta ocasión también me lo voy a fijar, os podréis imaginar que ya
he descartado totalmente la idea de mejorar mi mejor marca en una media que me
había fijado a inicios de año. Como siempre empezaré diciendo que el principal
objetivo es terminarla y disfrutarla, una media no es ninguna tontería aunque
algunas veces nos lo tomemos un poco a la ligera. En cuanto a tiempo y siendo
realista, sería
un éxito terminar por debajo de 1 hora 40 minutos, lejos de marcas
anteriores pero muy ajustado a mi realidad actual. Ya volverán momentos
mejores, de hecho estas tiradas largas de los fines de semana me han vuelto a “meter”
el gusanillo del maratón y de los entrenamientos, ya ronda por mi cabeza alguna
que otra fecha…
No me quiero despedir hoy sin enviar un fuerte abrazo y mucho ánimo a Pedro
Barrado que no ha tenido un buen día en el Maratón de Madrid después de unas largas semanas de muy buenos
entrenamientos. Ya sabemos que esto del maratón siempre nos puede reservar
alguna que otra sorpresa, pero como contamos con ello seguro que en cuatro días
está otra vez dando caña. Ahora tocará una buena recuperación y enseguida a
pensar en un nuevo reto.
Me despido ya como siempre diciendo que
PROMETO
ENTRENAR y espero que con más intensidad que en los últimos meses.
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